Los partidos políticos en Holanda están considerando la posibilidad de aumentar el límite de velocidad en las autopistas a 130 kilómetros por hora.
Este tema ha resurgido en las discusiones, posiblemente como una distracción de los desafíos más críticos en las negociaciones de formación del gabinete, especialmente en temas de asilo y migración.
Historia del Límite de Velocidad:
Hace cuatro años, el Gabinete Rutte III redujo el límite de velocidad a 100 km/h entre las 6:00 am y las 7:00 pm para disminuir las emisiones de nitrógeno.
Sin embargo, un estudio reciente de Wim de Vries de la Universidad de Wageningen sugiere que esta medida tiene un impacto mínimo en la reducción del nitrógeno, estimado en solo un 0,2%.
Investigaciones Actuales:
Ante esta evidencia, los partidos han solicitado a los Ministerios de Infraestructura y Gestión del Agua y de Agricultura, Naturaleza y Calidad de los Alimentos que evalúen la viabilidad y las consecuencias de restablecer el límite más alto de velocidad.
La intención es verificar si es posible revertir la reducción sin exacerbando los problemas ambientales existentes.
Reacciones Políticas:
El tema del límite de velocidad se ha politizado, con filtraciones a los medios que sugieren un uso estratégico de esta cuestión para desviar la atención de temas más espinosos como la política de asilo.
Geert Wilders, líder del PVV, recientemente exacerbó estas tensiones al abandonar una reunión sobre la política de asilo.
Posición del Ministerio de Nitrógeno:
La ministra de Nitrógeno de Holanda, Christianne van der Wal, ha expresado claramente su oposición a aumentar el límite de velocidad.
En un reciente debate parlamentario, afirmó que el «baño de nitrógeno» ya está saturado y que el país no puede permitirse aumentar las emisiones, incluso marginalmente.