El PVV, el VVD, el NSC y el BBB están considerando seriamente declarar la situación del asilo en los Países Bajos como una «crisis», lo que les permitiría adoptar medidas más drásticas, como la suspensión del procesamiento de nuevas solicitudes de asilo.
Esta decisión podría dar al nuevo Gabinete el tiempo necesario para implementar medidas estructurales a largo plazo para manejar el aumento en el número de solicitantes de asilo.
Propuestas de políticas de asilo:
Las partes están revisando propuestas que incluyen la implementación de un sistema de dos estatus, limitando los derechos de los solicitantes de asilo con menos posibilidades de obtener residencia.
También buscan restringir la reunificación familiar y reducir las instalaciones de acogida para aquellos con pocas probabilidades de obtener residencia.
Estas medidas pretenden hacer que los Países Bajos sean menos atractivos como destino para los solicitantes de asilo.
Posiciones de los partidos:
El PVV de Geert Wilders aboga por una reducción significativa del número de solicitantes de asilo, prefiriendo incluso cerrar completamente las fronteras a las personas que huyen de conflictos.
El VVD y el BBB también apoyan limitar la afluencia, mientras que el NSC está de acuerdo con la condición de que se respeten los derechos humanos y los tratados internacionales.
Antecedentes y desafíos legales:
Las discusiones sobre estas políticas no son nuevas y reflejan las propuestas que llevaron al colapso del Gabinete Rutte IV.
La legislación holandesa permite medidas temporales en situaciones de emergencia, pero la situación actual del asilo se considera estructural, no una emergencia.