Holanda, junto con otros siete países de la Unión Europea, está impulsando una iniciativa para restringir los viajes de los diplomáticos rusos en la zona Schengen por temor de espionaje.
Esta medida busca contrarrestar las sospechas de que muchos diplomáticos rusos actúan como agentes encubiertos dedicados a operaciones de espionaje, sabotaje y guerra de influencia.
Iniciativa liderada por la República Checa:
República Checa inició esta iniciativa a finales de 2022, ganando el apoyo de Holanda, Dinamarca, varios países del Este y los Estados bálticos.
En junio, el ministro de Asuntos Exteriores checo, Jan Lipavsky, envió una carta al jefe de política exterior de la UE, en nombre de estos ocho países.
«Esta medida reducirá significativamente el espacio operativo de los agentes rusos», aseguró Lipavsky en la misiva.
Lipavsky ha señalado en una entrevista que hay «información concreta sobre numerosos casos de sabotaje ruso».
Lo que refuerza la urgencia de limitar los movimientos de los diplomáticos rusos.
Según él, las embajadas de Rusia se están utilizando como centros para llevar a cabo una guerra híbrida contra Europa.
Contexto tras la invasión de Ucrania:
Desde la invasión de Ucrania por Rusia en febrero de 2022, Europa ha expulsado a unos 600 diplomáticos rusos, de los cuales 400 fueron señalados como oficiales de inteligencia.
Utilizar diplomáticos para actividades de espionaje es una práctica común en la diplomacia internacional, gracias a la libertad y la inmunidad que disfrutan estos funcionarios.
Sin embargo, la creciente preocupación por las actividades encubiertas rusas ha motivado a varios países a actuar.
Apoyo y oposición en la UE:
Los Países Bajos respaldan la propuesta checa, aunque el Ministerio de Asuntos Exteriores neerlandés expresó su descontento por la filtración de la carta.
A pesar del apoyo de varios países, la UE está dividida respecto a esta iniciativa.
Alemania, Austria e Italia han manifestado su oposición, argumentando que las restricciones podrían provocar represalias de Moscú, como limitaciones a los diplomáticos y ciudadanos europeos en Rusia.
Además, estos países consideran vital mantener abiertos los canales diplomáticos con Rusia, incluso en medio de las tensiones.