El ministro de Economía, Dirk Beljaarts, ha decidido retirar la propuesta de ampliar a 48 horas el plazo de entrega de cartas y postales por parte de PostNL.
La decisión se tomó después de que una mayoría de la Tweede Kamer se pronunciara en contra de la medida.
Argumentando que no resolvería los problemas actuales de fiabilidad en el servicio de entrega de correo.
Debate en la Tweede Kamer: preocupaciones por la fiabilidad:
Durante el debate, el ministro Beljaarts defendió su propuesta como una posible solución para mejorar la situación actual, ya que el plazo de 24 horas para la entrega de correo de PostNL no se está cumpliendo en la mayoría de los casos.
Según Beljaarts, el enfoque debería centrarse en la fiabilidad del servicio en lugar de la rapidez, ya que esto es lo que más valoran los usuarios.
Sin embargo, reconoció que su propuesta no contaba con el apoyo necesario y se mostró decepcionado.
“No hacer nada ahora tiene consecuencias”, advirtió, aunque finalmente decidió no presentar la propuesta formalmente.
Críticas del Parlamento: preocupaciones sobre la influencia de PostNL:
El rechazo de la Tweede Kamer a la propuesta se centró en que el ministro estaba cediendo demasiado a las demandas de PostNL.
Algunos diputados cuestionaron la necesidad de ampliar el tiempo de entrega de correos personales y la viabilidad de esta medida como solución a largo plazo.
Henk Vermeer, del BBB, sugirió que PostNL había negociado de manera ventajosa si lograba conseguir este cambio. Lo que despertó dudas sobre la independencia del proceso de toma de decisiones.
Beljaarts, por su parte, defendió que si hubiera accedido a las peticiones de PostNL, la empresa habría solicitado un plazo de tres días para la entrega. Junto a una subvención de 30 millones de euros para mantener a flote el servicio postal universal.
Beljaarts también indicó que no consideraba necesaria la ayuda estatal para PostNL en este momento.
Dudas sobre la situación financiera de PostNL:
La parlamentaria Femke Zeedijk, del partido NSC, cuestionó la justificación de una posible ayuda financiera a PostNL. Argumentando que la empresa ha tenido un desempeño financiero sólido.
Zeedijk señaló que PostNL generó beneficios a través de la entrega de paquetes y envíos postales, además de haber repartido 330 millones de euros en dividendos y recompras de acciones a sus accionistas en 2022.
“¿Cómo es posible que una empresa acuda al gobierno a pedir dinero más de un año después de una transacción de este tipo?”, planteó Zeedijk.
Sugiriendo que los problemas financieros de PostNL no justifican la necesidad de ampliar el tiempo de entrega ni la intervención del gobierno.
Futuro incierto para el servicio postal:
Con la retirada temporal de la propuesta, el futuro del servicio postal y su sostenibilidad a largo plazo sigue siendo un tema pendiente de resolución.
El debate pone de manifiesto las tensiones entre la búsqueda de soluciones para mejorar la fiabilidad del servicio y las preocupaciones sobre el papel del gobierno en la intervención de servicios privados.
Aunque por ahora se mantiene el plazo de entrega de 24 horas, la discusión continuará en los próximos meses.
Mientras se buscan alternativas para garantizar un servicio confiable y sostenible.