El Ministerio de Agricultura de Holanda ha decretado un encierro obligatorio a nivel nacional para todas las aves de corral tras la detección de un brote de gripe aviar en una granja de pollos orgánicos en Putten.
También se ha reportado un caso en Kleve, Alemania, cerca de la frontera neerlandesa, lo que aumenta el riesgo de propagación.
Riesgo moderado a alto:
Según el Ministerio, la medida fue tomada debido al riesgo «moderado a alto» de infección en granjas avícolas. Basado en la situación actual en los Países Bajos y otros países de la Unión Europea.
La decisión fue respaldada por la organización de agricultores LTO, preocupada por la seguridad del sector avícola.
Impacto en avicultores y bienestar animal:
La ministra Femke Wiersma reconoció que esta es una medida severa, especialmente para avicultores y dueños de aves de cría en el hogar, pero subrayó que «la seguridad de los animales es primordial».
La obligación de mantener a las aves en el interior afecta principalmente a las aves criadas comercialmente. Aunque los faisanes y ratites, como avestruces y ñandúes, están sujetas a evaluaciones adicionales.
Contexto reciente:
Un brote de gripe aviar fue detectado por última vez en Holanda hace casi un año, lo que llevó al Ministerio a imponer restricciones similares entre noviembre del año pasado y la primavera de este año.
Las últimas regiones, como Limburgse Peel y Gelderse Valley, se liberaron de estas medidas el pasado 24 de abril.