Rabobank, uno de los gigantes bancarios, ha entrado en un conflicto legal con la Autoridad de los Mercados Financieros (AFM) al impugnar una multa de 12 millones de euros. Esta sanción, impuesta por prácticas hipotecarias consideradas riesgosas, ha desatado una controversia en el sector financiero.
Origen del Conflicto:
La AFM acusa a Rabobank de infringir las normativas al otorgar hipotecas personalizadas que, según el regulador, expusieron a los clientes al riesgo de endeudamiento excesivo. Según la AFM, Rabobank no prestó la atención necesaria en la concesión de estos préstamos, a menudo dejando la decisión en manos de la interpretación individual de sus empleados.
Investigación y Hallazgos:
La AFM basó su decisión en una muestra aleatoria que reveló que varias hipotecas otorgadas por Rabobank superaban el máximo permitido en relación con los ingresos de los clientes. Estos préstamos implicaron para los clientes compromisos financieros prolongados y elevados.
Respuesta de Rabobank:
Rabobank no solo cuestiona la representatividad de la muestra utilizada por la AFM sino que también desafía la conclusión del regulador sobre una violación estructural de las normas. El banco considera que la cuantía de la multa es «desproporcionada» y ya ha anunciado su intención de presentar un recurso de apelación.