En un emotivo acto de memoria y protesta, la plaza Vredenburgplein en Utrecht se cubrió de zapatos de niños el domingo, en un poderoso recordatorio de las vidas palestinas perdidas en la Franja de Gaza durante los últimos cuatro meses. La iniciativa, organizada por la Fundación Plante un Olivo, buscó llamar la atención sobre la grave situación que enfrentan los niños en Gaza, muchos de los cuales han caído víctimas de la violencia y la falta de recursos básicos como alimento y agua.
Una Plaza Llena de Recuerdos:
Durante el evento, cada 10 minutos se añadió un nuevo par de zapatos a la creciente exhibición, mientras se pronunciaban los nombres de los niños fallecidos, llenando el espacio con un simbolismo desgarrador. Al final del día, la plaza se transformó en un mar de calzado infantil, cada par representando una vida joven perdida en el conflicto.
La Crisis Humanitaria en Gaza:
La Fundación Plante un Olivo resaltó la alarmante frecuencia con la que los niños palestinos están muriendo en Gaza, no solo debido a la violencia directa, sino también por hambre y sed, en un contexto donde el acceso a suministros de socorro es extremadamente limitado. “En promedio, cada 10 minutos muere otro niño palestino”, señaló la organización, enfatizando la escalada del conflicto a una crisis humanitaria de proporciones desastrosas.
Datos Alarmantes de UNICEF:
La gravedad de la situación fue subrayada por UNICEF, que recientemente informó sobre el alarmante aumento de casos de desnutrición aguda entre los niños menores de dos años en el norte de Gaza, donde el número se ha duplicado en solo un mes. La desnutrición y deshidratación han llevado a la muerte de 23 niños en las últimas semanas, evidenciando la urgente necesidad de intervención humanitaria.