Quincy Promes, futbolista holandés del Spartak de Moscú, se encuentra encarcelado en Dubái desde finales de febrero tras abandonar el lugar de un accidente de tráfico.
Además, enfrenta una solicitud de extradición por parte de la Fiscalía holandesa, siendo considerado un fugitivo en su país natal.
Condenas y Acusaciones:
Promes, quien previamente jugó para la selección holandesa, ha sido condenado a seis años de prisión por tráfico de cocaína y a un año y medio por apuñalar a su primo en una fiesta.
Su arresto en Dubái surgió durante un intento de salida en un vuelo comercial, bajo la confusión de si su detención fue por el accidente de tráfico o por ser nombrado fugitivo a través de un Boletín Rojo de Interpol por las autoridades neerlandesas.
Situación Contractual y Reacciones del Club:
Oleg Malyshev, director general del Spartak de Moscú, confirmó que el salario de Promes será suspendido conforme a las condiciones contractuales del club, que estipulan la no remuneración durante ausencias no justificadas del equipo.
Esta decisión se toma mientras Quincy Promes enfrenta condiciones difíciles de detención en Dubái, compartiendo celda con más de 20 reclusos en un ambiente descrito por reportes como extremadamente duro.