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Quiebra Esprit, cerrando sus tiendas en los Países BajosEsprit - Foto de Rudolphous en Wikimedia Commons

La sucursal de la cadena de ropa Esprit en los Países Bajos ha sido declarada en quiebra por el tribunal de Ámsterdam, resultando en la pérdida de empleo para más de 200 personas.

Según el comisario Erik Schuurs, no hay perspectivas de reactivación para la división holandesa de la empresa.

Cierre de Tiendas y Procedimientos de Quiebra:
Las 18 tiendas holandesas cerraron a principios de esta semana después de que la empresa matriz, Esprit Holdings, iniciara un procedimiento de quiebra para su división en los Países Bajos. 

El tribunal de Ámsterdam otorgó inicialmente a Esprit una moratoria, la cual se ha convertido ahora en una quiebra definitiva. 

“Esto es muy desafortunado para todos los empleados y otras partes implicadas”, comentó Schuurs.

Situación de Inventarios y Operaciones en Línea:
No se realizó la colección de invierno, lo que significa que prácticamente no quedan existencias en las tiendas holandesas. 

Sin embargo, la tienda web holandesa de Esprit seguirá operando, ya que se gestiona íntegramente desde Alemania. 

Los derechos de marca también están fuera del alcance de la quiebra holandesa, ya que se encuentran en otras partes del grupo Esprit.

Problemas Financieros de Esprit:
Esprit ha estado enfrentando dificultades financieras en varios países debido a varios factores:

  • Aumento de Costos: Los costos de energía y compras han aumentado considerablemente.
  • Competencia: El sector minorista enfrenta una fuerte competencia de grandes tiendas chinas en línea.

La empresa, fundada en 1968, solicitó a principios de este año una forma de aplazamiento de pago para sus departamentos fuera de los Países Bajos, con la esperanza de ganar tiempo para llegar a un acuerdo con los acreedores. 

Las tiendas Esprit también habían sido cerradas en Bélgica.

Más de 200 personas perderán su trabajo.

Las 18 tiendas holandesas han cerrado, pero la tienda web seguirá operando, gestionada desde Alemania.

Aumento de costos de energía y compras, competencia de grandes tiendas chinas en línea y altos costos salariales en Alemania.

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