Un grupo de clientes de Bunq exige que la dirección de este banco online declare bajo juramento sobre su rol en la lucha contra el phishing y el fraude relacionado con el servicio de atención al cliente.
Así lo afirma el abogado Chizki Loonstein, quien representa a las víctimas junto con otros colegas.
Aunque Bunq ya ha prometido compensar a los afectados, Loonstein señala que aún hay «decenas» de clientes esperando recibir su indemnización.
Acciones Legales en Marcha:
Los abogados de los clientes han llevado el caso ante los tribunales en nombre de un «grupo simbólico» compuesto por diez personas.
«A algunos se les ha dicho que no recibirán nada o aún no han recibido una oferta», comenta Loonstein.
«Esto, a pesar de que Bunq afirmó que trataría generosamente a todas las víctimas de fraude».
Según el abogado, el grupo de afectados ha sufrido pérdidas que ascienden a cientos de miles de euros.
Fraude Masivo Revelado por la Prensa:
El escándalo en Bunq salió a la luz tras un reportaje de NOS y NRC en mayo, en el que se reveló que un número significativo de clientes perdió grandes cantidades de dinero por estafas.
Decenas de usuarios vieron cómo se esfumaban hasta 200.000 euros en cuestión de minutos debido a una combinación de técnicas de phishing y fraudes en el servicio de asistencia.
Los estafadores se hicieron pasar por empleados del banco, logrando que los clientes revelaran sus datos de acceso o realizaran transferencias.
Las víctimas encontraron dificultades para contactar con el banco y también criticaron la falta de medidas de seguridad.
Según Bunq, 85 clientes fueron afectados y recibirán una compensación promedio del 85% del monto perdido.
Exigencias de Respuestas por Parte de la Dirección:
Los abogados ahora buscan interrogar bajo juramento al director ejecutivo Ali Niknam sobre la gestión de las denuncias de fraude.
Además, también quieren escuchar a los codirectores Vladimir Brodski y Raymond Kasiman.
Expertos en ciberseguridad también podrían ser convocados para evaluar la protección ofrecida a los clientes del banco.
El interrogatorio obligaría a los directivos a responder con la verdad, sin posibilidad de evasivas.
«Ya no podrá evitar dar respuestas claras», advierte Loonstein sobre Niknam.
El tribunal de Ámsterdam recibió la solicitud para este interrogatorio, pero todavía falta que el juez la apruebe.
Por su parte, un portavoz de Bunq ha declarado que «Bunq no tiene conocimiento de ninguna solicitud y, por lo tanto, no podemos responder sustancialmente al respecto».
¿Cuántas personas están involucradas en esta demanda?
Un grupo simbólico de diez personas ha llevado el caso a los tribunales, pero se estima que hay decenas de afectados.
¿Por qué exigen una declaración bajo juramento?
Las víctimas quieren que la dirección de Bunq aclare su papel en la gestión de los fraudes y las medidas de seguridad.