La mayoría del Parlamento neerlandés insta a la ministra de Asilo y Migración, Marjolein Faber, a apoyar a los municipios en la recaudación de las contribuciones financieras de los trabajadores ucranianos para su alojamiento.
Desde el 1 de julio, los refugiados ucranianos que tienen empleo remunerado están obligados a aportar una parte de sus ingresos para cubrir los costos de su acogida.
Sin embargo, una encuesta realizada revela que casi ningún municipio ha comenzado a cobrar este dinero.
Preocupaciones administrativas y falta de opciones:
La encuesta destaca que, desde Ámsterdam hasta Maastricht, los municipios enfrentan dificultades debido a los trámites administrativos necesarios para llevar a cabo la recaudación.
También expresan preocupación por la falta de herramientas si los refugiados se niegan a pagar.
La diputada del PVV, Marina Vondeling, ha planteado preguntas al respecto.
Argumentando que es justo que los ucranianos no aporten contribuciones en su alojamiento, ya que «los holandeses deben pagar todo ellos mismos».
Vondeling exige que asegure la recaudación en todos los municipios y se cumpla con el aumento de las contribuciones prometido en el acuerdo de coalición.
Apoyo administrativo y carga para los municipios:
El D66 también respalda la necesidad de que los trabajadores ucranianos paguen parte de su alojamiento.
Pero critica la falta de apoyo del gobierno a los municipios en la implementación de esta medida.
Anne-Marijke Podt, diputada del D66, destacó la carga administrativa adicional que supone para los municipios y lamentó que no se les ofrezca la ayuda necesaria.
«Es incomprensible que el gobierno deje solos a los municipios que construyen alojamiento para los ucranianos», afirmó.
Postura del CDA y GroenLinks-PvdA:
Henri Bontenbal, líder del CDA, considera «justo» que los ucranianos con ingresos contribuyan a su alojamiento.
Pero también pide que el gobierno facilite a los municipios los recursos necesarios para evitar que se vean atrapados en la burocracia.
Por otro lado, Kati Piri, parlamentaria de GroenLinks-PvdA, se ha mostrado crítica desde hace tiempo sobre la aplicación de esta medida.
Señalando que los ingresos de los ucranianos son variables y, en muchos casos, dependen de trabajos temporales.
Piri sugiere que una contribución voluntaria podría ser más efectiva y evitaría los problemas administrativos actuales.