La ciudad de Nijmegen reducirá el límite de velocidad en la mitad de sus calles de 50 km/h a 30 km/h, con el objetivo de reducir los accidentes de tráfico graves y mejorar la calidad de vida.
Este plan fue confirmado por el alcalde y los concejales de la ciudad y será enviado al pleno del Ayuntamiento para su aprobación.
Razones detrás de la reducción del límite de velocidad:
El número de personas heridas en accidentes de tráfico en Nijmegen ha aumentado considerablemente en los últimos cuatro años, duplicándose de 62 a 128 heridos anuales.
La ciudad espera que la reducción de la velocidad máxima disminuya el número de accidentes graves.
Además, la coalición política de la ciudad cree que un límite de velocidad más bajo mejorará la seguridad para ciclistas y peatones, fomentará menos viajes en coche a corta distancia y reducirá el ruido del tráfico.
Otros beneficios del plan:
El proyecto también contempla el aumento de espacios verdes, incluyendo la plantación de más árboles, para combatir el calor extremo y las inundaciones.
Al reducir el uso de automóviles y hacer las calles más seguras, se espera que Nijmegen logre un entorno urbano más sostenible y habitable.
Nijmegen sigue el ejemplo de Ámsterdam y Róterdam:
Nijmegen, la décima ciudad más grande de los Países Bajos con 187.000 habitantes, se une a ciudades como Ámsterdam y Róterdam. Que ya han implementado medidas similares de reducción de velocidad en los últimos años.