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Críticas al sistema de impuestos de la Caja 3 por su complejidadBelastingdienst - Foto de Bic en Wikimedia Commons

El Consejo de Estado de los Países Bajos ha cuestionado duramente los cambios propuestos al sistema de impuestos sobre los ahorros y las inversiones, conocido como “Caja 3”.

El organismo advirtió que el nuevo esquema, diseñado para reemplazar el sistema actual basado en rendimientos ficticios, es excesivamente complejo y podría afectar tanto a los contribuyentes como a la administración tributaria.

Principales preocupaciones del Consejo de Estado:

  • Carga administrativa: El nuevo sistema impondría requisitos administrativos más pesados, afectando a aproximadamente 1,6 millones de contribuyentes.
    Esto podría generar un peor servicio por parte de Hacienda y menos oportunidades de consulta con inspectores fiscales.
  • Neutralidad presupuestaria: El enfoque del gobierno de mantener los mismos niveles de ingresos fiscales limita la flexibilidad para diseñar un sistema eficiente y justo.
  • Falta de visión integral: El Consejo destacó la necesidad de una estrategia coherente para toda la tributación de la riqueza. Evitando inconsistencias entre las distintas «cajas» del sistema fiscal.

Impacto en plazos:
Con los retos actuales, la implementación del sistema en 2027 parece improbable, y 2028 también está en duda.

Contexto y razones del cambio:
El gobierno neerlandés está reformando la Caja 3 tras dos sentencias judiciales clave:

  • 2021: El Tribunal Supremo dictaminó que el sistema basado en rendimientos ficticios violaba el Convenio Europeo de Derechos Humanos.
  • 2023: Un sistema revisado fue rechazado en junio por los tribunales.

¿Qué propone el nuevo sistema?

  • Impuesto basado en rendimientos reales: Gravar la acumulación de riqueza en lugar de rendimientos ficticios.
  • Impuestos específicos sobre ciertos activos: Por ejemplo, bienes inmuebles alquilados y acciones de empresas emergentes estarían sujetas a impuestos sobre las ganancias de capital.

Reacciones y próximos pasos:
El ministro de Finanzas, Eelco Heinen, reconoció las limitaciones inherentes al sistema tributario, afirmando que no existe un esquema «ideal».

“El gabinete analizará cuidadosamente las críticas del Consejo de Estado y emitirá una respuesta en una fecha posterior”, declaró.

El informe subraya que sin ajustes significativos, el nuevo sistema podría generar ineficiencias y frustración entre los contribuyentes.

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