Desde el 1 de enero, la Agencia Central para la Recepción de Solicitantes de Asilo (COA) dejó de gestionar las solicitudes de subsidios para los refugiados que obtienen un permiso de residencia temporal.
Esta decisión ha dejado a muchos refugiados en riesgo de problemas económicos, ya que dependen de subsidios como el de alquiler para cubrir sus necesidades básicas.
La COA sostiene que esta tarea ahora corresponde a los municipios, citando la Ley de Integración: que asigna a los gobiernos locales la responsabilidad de orientar a los inmigrantes durante sus primeros seis meses en el país.
Sin embargo, los municipios argumentan que no estaban preparados para asumir esta tarea tan repentinamente.
Consecuencias para los refugiados
Muchos solicitantes de asilo no tienen conocimiento del sistema ni de cómo solicitar subsidios.
Desde 2015, el COA gestionaba estas solicitudes en su nombre, facilitando su integración inicial.
Sin embargo, los cambios recientes en el Servicio de Subsidios han complicado el proceso, dejando a los refugiados que reciben permisos desde el 1 de enero en un limbo administrativo y financiero.
Un funcionario de un gran municipio expresó su frustración:
“Recibimos un correo del COA en Nochevieja diciendo que dejaban de gestionar los subsidios al día siguiente. No podemos asumir estas tareas con tan poca preparación”.
Reacción de los municipios y la VNG
La Asociación de Municipios Holandeses (VNG) confirmó que el COA comunicó la decisión a finales de 2023, pero mencionó que se suponía que habría acuerdos y más consultas sobre cómo implementar la transición.
Sin embargo, esto no se concretó, dejando a los municipios en una posición incierta y sobrecargada.
Impacto económico y social
El cambio ha dejado a muchos refugiados sin acceso a subsidios vitales, como los de alquiler, creando una situación de vulnerabilidad económica.
Si no se aborda rápidamente, esta brecha administrativa podría llevar a dificultades significativas para los solicitantes de asilo que intentan establecerse en los Países Bajos.