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¿Autos o Bicicletas? El transporte en Holanda

Cuando pensamos en Holanda, lo primero que nos viene a la mente son bicicletas 🚴♀️.
Y no es para menos: hay más bicicletas que habitantes.
📊 Dato real: el 28% de todos los desplazamientos en el país se hacen en bicicleta.
Con más de 37.000 kilómetros de carriles bici, semáforos dedicados y una creciente infraestructura para bicicletas eléctricas, hasta estaciones de carga, el país ha sido históricamente un modelo mundial en movilidad sostenible.
Pero aquí viene el plot twist...
🚘 ¡Casi 9 millones de coches en un país con 17,5 millones de habitantes!
La congestión, la contaminación del aire y el ruido en zonas urbanas como Ámsterdam, Róterdam o Utrecht son cada vez más notorios.
Y aunque el gobierno de Holanda ha apostado por iniciativas como zonas de bajas emisiones o el fomento de la bicicleta eléctrica, el coche sigue siendo el medio de transporte preferido para muchos, especialmente en trayectos largos o rurales.
🏙️ Muchas ciudades ya tienen zonas libres de autos o están subiendo las tarifas de aparcamiento, pero… ¿es suficiente?
Aquí nace un dilema social y político: ¿debería el Gobierno tomar medidas más radicales para frenar el uso del coche?
Algunos dicen que hay que proteger el aire, las ciudades y el clima. 💸 Proponen multas más altas, prohibiciones en el centro y más subsidios para los ciclistas.
Mientras otros responden que hay familias, personas mayores y trabajadores con horarios imposibles. 🚜 En zonas rurales, la bici no es una opción realista.
La bicicleta ha sido un símbolo de libertad en los Países Bajos. Pero hoy, esa libertad está en disputa.
💬 Ahora te toca a ti:
👉 ¿Debe el gobierno neerlandés limitar mucho más el uso del coche para proteger su cultura ciclista?