2 min
Esqueletos humanos durante obras de alcantarillado en Weert

Los restos tendrían entre 200 y 500 años; podrían ser víctimas de epidemias mortales
Un descubrimiento inesperado bajo tierra
Durante trabajos de renovación del sistema de alcantarillado en Weert, provincia de Limburgo, los trabajadores encontraron ocho esqueletos humanos enterrados en ataúdes de madera, en una zona que no era un cementerio oficial.
Según informó el municipio, los féretros estaban muy deteriorados, pero los restos óseos estaban en buen estado.
Entre los cuerpos hallados hay al menos una mujer y un niño. Los arqueólogos estiman que los restos tienen entre 200 y 500 años de antigüedad.
¿Un cementerio improvisado por epidemias?
El hallazgo ha generado preguntas históricas. El cementerio habitual de la época se encontraba a varios cientos de metros, por lo que los expertos creen que podría tratarse de un entierro separado, posiblemente usado durante brotes de enfermedades contagiosas como la peste o la disentería.
Aunque no hay pruebas concluyentes aún, esta teoría explicaría por qué estos cuerpos fueron enterrados lejos del cementerio común.
También hallaron cerámica y un muro
El barrio donde se realizó la excavación tiene valor arqueológico, por lo que ya había arqueólogos presentes en la zona.
Además de los esqueletos, el equipo descubrió fragmentos de un antiguo muro y piezas de cerámica, lo que podría aportar más información sobre el uso histórico del lugar.
Tras su estudio, los restos serán trasladados al depósito provincial de Heerlen, donde se conservarán para futuras investigaciones.
No es un caso aislado
Este tipo de descubrimientos no son raros en los Países Bajos. A principios de este año, arqueólogos encontraron 140 tumbas con restos óseos en Gouda, aunque en ese caso, se trataba de un cementerio documentado.
Los arqueólogos valoran estos hallazgos como una fuente de información clave para entender las prácticas funerarias, las enfermedades del pasado y la vida cotidiana en épocas anteriores.