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Extinction Rebellion Nederland protesta en Ámsterdam - Foto de @NLRebellion en X

Activistas del grupo Extinction Rebellion realizaron un bloqueo en la autopista A10 en Ámsterdam, como parte de una protesta contra la financiación de combustibles fósiles. 

La protesta contó con la participación de aproximadamente cien manifestantes, algunos de ellos vestidos de naranja por el Día del Rey. 

A pesar de los intentos de la policía por disolver el bloqueo, los activistas se mantuvieron firmes, desplegando pancartas y enfrentándose con los oficiales.

Bloqueo Pro Palestino en Piet Heinkade:
Simultáneamente, un grupo de activistas pro palestinos bloqueó el Piet Heinkade, una vía central en Ámsterdam. 

Unos 30 manifestantes realizaron una sentada, ondearon banderas palestinas y vociferaron consignas contra la guerra, Israel y el rey Willem-Alexander. 

Extinction Rebellion eligió el Día del Rey en Ámsterdam para la protesta, buscando hacer una declaración política contra las acciones de Israel en Gaza y la falta de pronunciamiento del rey holandés.

Reacciones y Medidas de Seguridad:
Las autoridades de Ámsterdam criticaron la elección del día para las manifestaciones, considerando que la seguridad de visitantes y turistas podría verse comprometida. 

Se destacó el peligro de bloquear carreteras de alta velocidad y la posible necesidad de redirigir recursos policiales. 

La policía advirtió a los manifestantes de Extinction Rebellion que podrían ser arrestados si no acataban las órdenes de desalojo.

Impacto en la Ciudad:
El tráfico en Ámsterdam se vio significativamente afectado por ambas manifestaciones.
Los bloqueos provocaron retrasos y complicaciones para los residentes y visitantes, especialmente aquellos que acudían a la ciudad para participar en las celebraciones del Día del Rey. 

El momento de las protestas, coincidiendo con un día festivo nacional, añadió una capa de complejidad a la gestión de la situación por parte de las autoridades.

Reacciones y Consecuencias Futuras:
Las manifestaciones han resaltado la tensión entre el derecho a protestar y la necesidad de mantener el orden público y la seguridad. 

La respuesta de las autoridades y la reacción pública podrían influir en futuras políticas sobre manifestaciones y uso de espacios públicos en Ámsterdam y posiblemente en otras ciudades holandesas.