El icónico baño de Año Nuevo en Scheveningen, La Haya, que reúne anualmente a unas 10,000 personas para sumergirse en el Mar del Norte, ha sido cancelado debido a condiciones climáticas extremas.
Los organizadores anunciaron el lunes que fuertes vientos, corrientes intensas y olas de hasta tres metros hacen que el evento sea demasiado peligroso.
Decisión por seguridad
Alex Schuttert, presidente de Stichting Nieuwjaarsduiken Nederland, explicó que la cancelación sigue las recomendaciones del municipio de La Haya y de la brigada de rescate.
“Es una verdadera lástima, pero la seguridad de los participantes es nuestra prioridad”, comentó.
El servicio de rescate voluntario de La Haya, liderado por Mike van den Hoogenband, advirtió a los ciudadanos que no intenten sumergirse en el mar por su cuenta.
“Ponen en peligro sus vidas y las de los equipos de emergencia que podrían verse obligados a actuar”, dijo.
Condiciones extremas en la costa
La costa holandesa se enfrenta a vientos de hasta 100 km/h el martes y miércoles, con rachas de 75 km/h en el interior.
El alcalde de La Haya, Jan van Zanen, también hizo un llamado a evitar la playa, calificando la situación de «demasiado arriesgada».
Van Zanen expresó su deseo de participar en el evento el próximo año si las condiciones lo permiten.
Una tradición con historia
La tradición del baño de Año Nuevo comenzó en 1960 en Zandvoort y se ha convertido en una costumbre nacional.
A pesar del frío habitual, con temperaturas del agua de 6 a 7 grados, este año el mar ha estado ligeramente más cálido, alcanzando los 8,1 grados el pasado fin de semana.
Sin embargo, esta no es la primera vez que el evento se suspende.
En 2021 y 2022, la pandemia obligó a cancelar la inmersión, y las renovaciones cerca del Kurhaus han cambiado su ubicación habitual.
Cancelaciones en todo el país
Además de Scheveningen, las inmersiones de Año Nuevo también se han cancelado en otras localidades, como Ameland, Castricum, Noordwijk aan Zee y Róterdam, debido al mal tiempo previsto.