2 min
Países Bajos no alcanza su meta de albergues para solicitantes de asilo

A menos de un mes de la fecha límite del 1 de julio de 2025, los municipios de Países Bajos han creado 73.000 plazas de albergues para solicitantes de asilo.
Esto representa un 27% menos que el objetivo de 101.500 plazas establecido por la Ley de Distribución de Asilo, según una investigación conjunta de NOS, Nieuwsuur y emisoras regionales.
Muchas de las plazas son temporales y costosas
El estudio revela que alrededor de un tercio de las plazas creadas son temporales y solo están disponibles por menos de seis meses.
Si se excluyen estas, la cifra real de plazas disponibles cae a 55.000. Además, estas soluciones temporales suelen ser más caras y menos estables.
Dos tercios de los municipios no cumplieron
Aproximadamente dos de cada tres municipios no lograron cumplir su cuota, y varios señalaron razones similares: dificultades para encontrar ubicaciones adecuadas, resistencia local y una política nacional incierta que ha frenado decisiones clave.
“Cuando no hay espacio disponible, organizar centros es muy complicado. Y la política errática desde La Haya no ayuda”, declaró un portavoz del municipio de Barendrecht.
El caos político agrava la situación
La posibilidad de que el gobierno derogara la ley debilitó el apoyo local a nuevos centros, especialmente en regiones como Haaglanden, donde los planes municipales se congelaron ante la falta de claridad.
La situación se complicó aún más tras la dimisión de la ministra de Asilo, Marjolein Faber (PVV).
La ley ahora está en proceso de ser transferida a Mona Keijzer, pero hasta que esto ocurra, el ministro de Justicia, David van Weel, mantiene la responsabilidad... aunque se negó a comentar sobre los hallazgos del estudio.
A pesar de todo, hay voluntad de avanzar
Pese al incumplimiento del objetivo, la mayoría de los actores implicados - incluidos el COA, municipios y provincias - están a favor de mantener la Ley de Distribución de Asilo.
Según NOS, hay más municipios que nunca con planes concretos para nuevos centros de acogida, algo que, aseguran, no habría sucedido sin la ley.