La nueva ley de alquileres, introducida en los Países Bajos el 1 de julio de 2024, buscaba ofrecer mayor estabilidad a los inquilinos al establecer los contratos permanentes como norma.
Sin embargo, ha provocado un aumento en la oferta de viviendas de corta duración. Favoreciendo a los expatriados y dejando a los residentes locales en desventaja.
Lagunas legales y prácticas cuestionables
Aunque la ley establece límites claros, las excepciones para estudiantes y trabajadores temporales han permitido a los propietarios priorizar contratos de alquileres de corta estancia.
Estas viviendas, destinadas a estadías de hasta seis meses, no están sujetas a las regulaciones de alquiler ni a topes de precios, lo que permite a los propietarios maximizar sus beneficios.
En plataformas como Pararius, los listados para expatriados han crecido significativamente.
ProperBee Vastgoed, una empresa de Rotterdam, indica claramente en sus anuncios que sus propiedades están reservadas para personas en estadías temporales.
Críticos como Gert Jan Bakker, de la organización Stichting !WOON, denuncian que esta clasificación de corta estancia se usa para eludir las protecciones del alquiler.
Impacto en los residentes locales
Ciudades como Nijmegen también muestran prácticas similares. En el complejo Canisiushof, las propiedades están reservadas exclusivamente para expatriados y estudiantes de intercambio, excluyendo a los residentes locales.
Esto ha reducido la disponibilidad de viviendas asequibles para los holandeses, convirtiendo la situación en un problema nacional.
Preferencia por los expatriados
Muchos propietarios prefieren alquilar a expatriados, temiendo que los inquilinos locales opten por quedarse a largo plazo. Lo que podría complicar la gestión de las propiedades.
Michel van der Steen, agente inmobiliario en La Haya, señaló que los listados etiquetados como “solo para expatriados” son cada vez más frecuentes, marginando aún más a los inquilinos locales.
Reacciones y medidas legales
Aunque la ley buscaba reducir los contratos temporales, un análisis reciente mostró un aumento del 45% en propiedades de corta duración.
Expertos legales, como Annemarie Govers-Schotten, predicen que esta tendencia llevará a mayores regulaciones y acciones legales.
Por su parte, el Ministerio de Vivienda ha anunciado que está monitoreando la situación y los municipios serán responsables de aplicar sanciones en caso de abuso.
Conclusión y pasos a seguir
Mientras se espera un informe del Ministro Keijzer sobre el impacto de la nueva ley, queda claro que las lagunas legales deben cerrarse para equilibrar el mercado y proteger a los inquilinos locales.