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Los funerales en Países Bajos superan los 10.000€ de media
Funeral © Rhodi Lopez en Unsplash
📈 Un aumento por encima de la inflación
Los funerales en Países Bajos se han encarecido un 40 % en la última década, un crecimiento que supera en un 9 % a la inflación, según cifras de Statistics Netherlands (CBS) publicadas por NOS.
En 2017, el precio medio de un entierro o cremación era de 7.500 €. Hoy, esa cifra ya supera los 10.000 €.
Costes inevitables
Según Lotte Wieling, directora de una funeraria en Enschede, una parte de los gastos es simplemente imposible de evitar:
- El difunto debe colocarse en un ataúd o cesta, lo que supone un coste básico.
- La ley exige esperar al menos 36 horas antes del entierro o cremación, lo que implica gastos de refrigeración en casa o en la funeraria.
- El certificado de defunción, las tarifas de cementerio o crematorio son ineludibles.
“Ya de entrada, empiezas con varios miles de euros, y eso ni siquiera incluye la despedida”, explica Wieling.
Cremaciones más caras y velorios más largos
El incremento también se debe a factores externos:
- El precio del gas ha elevado los costes de las cremaciones.
- La madera para ataúdes se ha encarecido.
- El envejecimiento de la población ha aumentado la demanda, lo que alarga los tiempos de espera y obliga a mantener a los difuntos más tiempo en velación, con costes añadidos.
Seguros funerarios que se quedan cortos
Muchos neerlandeses tienen seguro funerario, pero en la práctica las coberturas no alcanzan.
“Hace años, la gente contrataba pólizas de 3.000 o 4.000 €, convencidos de que era suficiente”, señala Wieling. “Hoy, esa cantidad ya no cubre ni de lejos lo que cuesta un funeral digno. Solo una recepción sencilla para cien personas puede superar los 2.000 €”.
¿Cómo ahorrar en un funeral?
Aunque el precio medio sigue al alza, existen formas de reducir gastos:
- Organizar el servicio conmemorativo en casa.
- Evitar ramos grandes y pedir a los asistentes que traigan una sola flor.
- Sustituir el tradicional obituario en prensa por una tarjeta de condolencias digital compartida en redes sociales.
De esta manera, la despedida sigue siendo personal y significativa, pero más asequible.
