La emblemática Gerbrandy Tower de IJsselstein, conocida como «El Árbol de Navidad Más Alto del Mundo,» volvió a encenderse el sábado, marcando su 26ª iluminación desde 1992.
Con una altura de 366.8 metros, el espectáculo luminoso es un símbolo navideño en los Países Bajos. Visible desde hasta 50 kilómetros, dependiendo del clima.
Encendido ceremonial bajo condiciones desafiantes:
A pesar de la nieve, la lluvia y fuertes vientos, el equipo logró completar los preparativos a tiempo para la ceremonia de encendido.
El evento, encabezado por el alcalde de IJsselstein, Patrick van Domburg, y representantes de la fundación responsable del proyecto, reunió a vecinos y autoridades locales.
Aunque el mercado navideño programado en el centro de la ciudad fue cancelado debido al mal tiempo, el espíritu festivo se mantuvo intacto.
Sostenibilidad y eficiencia energética:
La iluminación de la torre utiliza 120 lámparas LED Osram HQL, instaladas en cables que se extienden cuatro kilómetros a lo largo de la estructura.
Las luces están fijadas a alturas de 125, 200, 265 y 325 metros, aseguradas al suelo mediante bloques existentes de anclaje.
Desde la implementación de tecnología LED, el consumo energético se ha reducido significativamente, reflejando un compromiso con la sostenibilidad.
Según la fundación, instalar las luces cuesta 55,000 euros, mientras que el consumo energético implica un gasto adicional de 800 euros.
El proyecto se financia mediante donaciones de 2,000 personas y el patrocinio de negocios locales.
Una tradición con historia y desafíos:
Desde su inauguración, esta tradición ha enfrentado interrupciones por razones técnicas y financieras, como un impacto de rayo en 2017 que dañó el sistema.
Sin embargo, la torre o árbol de navidad ha iluminado IJsselstein en 26 de los últimos 32 años, consolidándose como un ícono navideño en la región.