Holanda tiene el potencial de convertirse en líderes mundiales en tecnología de laboratorio en un chip (LoC). Según un informe del Fondo de Tecnología Profunda de Invest-NL.
Estas innovadoras tecnologías permiten realizar análisis químicos y biológicos en chips de apenas unos centímetros cuadrados, ofreciendo eficiencia y portabilidad.
“Con una estrategia nacional clara y mayores inversiones, los Países Bajos podrían consolidarse como un centro clave para estas tecnologías,” destacó Gert-Jan Vaessen, administrador del fondo.
Obstáculos en el sector:
A pesar de contar con una sólida base académica y un ecosistema emergente de startups, el informe subraya que muchas empresas enfrentan barreras significativas para ingresar al mercado.
Principalmente por falta de financiación.
Además, Europa en su conjunto está quedando rezagada frente a los Estados Unidos en tecnologías clave.
Dependencia tecnológica de EE. UU.:
Un informe complementario de la Oficina de Análisis de Política Económica de los Países Bajos (CPB) alerta sobre la dependencia europea de las empresas tecnológicas estadounidenses.
La investigadora Debby Lanser señaló:
- Ausencia de empresas tecnológicas líderes en Europa, frente a gigantes como Microsoft y Google.
- Bajo gasto en I+D: EE. UU. invierte el 3,5% de su PIB en investigación y desarrollo, mientras que los Países Bajos destinan entre el 1,6% y el 2,3%.
Lanser advirtió que los cambios en la política estadounidense podrían restringir el acceso a tecnología esencial. Afectando tanto la economía como las capacidades defensivas europeas.
Áreas críticas de pérdida:
Europa ya ha quedado rezagada en sectores como:
- Computación en la nube: Dominada por empresas estadounidenses.
- Defensa: El 66% de las armas europeas provienen de Estados Unidos, lo que subraya la dependencia de la región en este ámbito estratégico.
Recomendaciones:
El informe enfatiza que deben realizarse inversiones significativas en I+D. Ya que son esenciales para competir con Estados Unidos.
También, los Países Bajos deben implementar una estrategia nacional para aprovechar su potencial en laboratorio en un chip y reducir la dependencia tecnológica.