El mercado de coches eléctricos de segunda mano está experimentando una transformación significativa en los Países Bajos, especialmente Tesla.
Los precios han caído drásticamente debido al aumento de la oferta tras el fin de los contratos de leasing incentivados fiscalmente.
Precios en caída libre: Tesla Model 3 a partir de 14.000 euros
El Tesla Model 3, que en enero de 2024 tenía un precio medio de 30.000 euros, ahora se puede encontrar por tan solo 14.000 euros en el mercado de segunda mano.
Sitios de comparación como Gaspedaal.nl han registrado una caída del 25% en los precios a lo largo del año.
Muchos de estos coches provienen del sector del leasing, donde en 2019 se alcanzó un récord de ventas de coches eléctricos.
Ese año, los incentivos fiscales permitieron tasas impositivas muy bajas para el leasing de vehículos eléctricos durante un período de cinco años, que ahora ha expirado.
Un mercado inundado de coches eléctricos
Según datos de BOVAG, en 2019 se vendieron más de 51.000 coches eléctricos de leasing en los Países Bajos, muchos en los últimos meses del año.
Ahora que los contratos de leasing han finalizado, estos vehículos están entrando en el mercado de segunda mano. Aumentando la oferta y reduciendo los precios.
¿Qué tan fiables son los Tesla usados?
Rico Luman, analista de mercado automovilístico,, asegura que los Tesla siguen siendo una opción interesante para compradores.
«Un Tesla puede recorrer más de 500.000 kilómetros si se cuida adecuadamente», explicó.
Aunque el uso excesivo de cargadores rápidos puede afectar la batería, los Model 3 usados suelen tener una larga vida útil por delante.
Nuevos competidores y recortes de precios
Además del aumento de oferta, la llegada de vehículos eléctricos más asequibles de fabricantes europeos y chinos, junto con recortes de precios por parte de Tesla, ha puesto presión sobre todo el mercado de coches eléctricos.
Esto también ha contribuido a que los precios de los vehículos de segunda mano sean más competitivos.
¿Qué significa esto para los compradores?
La caída de precios es una oportunidad única para adquirir un coche eléctrico de calidad a un precio accesible.
Con una vida útil prolongada y una variedad de opciones en el mercado, estos vehículos representan una alternativa económica y sostenible.